Cómo surge Eli Nails Miami?

Holaa bella!!! te cuento un poco sobre mi historia y como surgio Eli Nails Miami.

Mi nombre es Eliani Leyva, soy cubana y manicurista con más de 15 años de experiencia. Comencé en este mundo a los 15 años, desde mi casa en Cuba, en medio de una realidad difícil, buscando una forma de generar ingresos por mí misma. En aquel entonces (estamos hablando del 2010), montar un pequeño negocio en casa era una de las pocas alternativas de emprendimiento que teníamos. Sin conocimientos técnicos, sin formación profesional, pero con muchas ganas, empecé a hacer uñas de manera autodidacta.

Al principio, mis trabajos eran muy básicos, aunque para mí eran perfectos. Poco a poco, con la práctica, fui mejorando. Trabajaba en una mesita en la esquina de la sala , asi estuve por varios años, pero como muchas veces pasa en la vida, tuve que poner en pausa esa etapa cuando me fui la universidad, estuve 3 años sin ejercerlo,hasta me fui a trabajar de para un restaurante , donde después de una mala, pero necesaria experiencia, decidi retomar lo que tanto me gustaba hacer. Con el tiempo, y con la ayuda de mi esposo y mi familia logré crear mi propio espacio , mi primer salón, donde además de uñas, también ofrecía otros servicios como depilación y peluquería.

Más adelante, retomé las uñas con más fuerza, y así llegué hasta el año 2020, cuando la pandemia del COVID cerró todo. Fueron tiempos muy difíciles. En 2022, decidí emigrar a los Estados Unidos en busca de nuevas oportunidades. A tan solo 15 días de haber llegado, ya estaba trabajando en un salón. Ahí aprendí cómo se trabajaba en este país y entendí que aquí las reglas eran distintas: necesitaba estudiar y sacar mi licencia profesional.

Trabajé en varios salones, cada uno con sus enseñanzas. Conoci mucha gente linda. En uno de ellos, aprendí técnicas completamente nuevas para mí, como el uso del builder gel y las uñas apres. Pero también viví experiencias duras. En algunos lugares cobraban el 50% incluso de las clientas que yo misma traía, o me hacían sentir como si no supiera hacer mi trabajo, en zonas donde el trato era muy desmotivador. A pesar de eso, seguía trabajando sin parar, y cuando salía del salón, me iba a hacer uñas a domicilio. Compré una mesita portátil que se convertía en maleta, y muchas noches salía a trabajar después de una jornada completa. Llegaba a casa a veces a las 12 de la noche, y al otro día comenzaba de nuevo.

En este pequeño espacio vivimos por 9 meses mi mama, mi esposo y yo, no tenia espacio para trabajar ahi, por eso iba a la casa de mis clientas . Agradecidas con todas las que me apoyaron desde el principio.

Un dia de navidad, trabajando en uno de los salones que me abrieron sus puertas.

Todo eso cambió cuando me mudé con mi familia a una casa más grande. Por primera vez tenía un espacio propio, un cuarto que pude convertir en mi estudio. Ahí decidí dar un giro completo: dejar los salones y empezar a trabajar por mi cuenta, con mis propias reglas, mi propio ritmo y mi propia visión. Al principio empece solo con lo que tenia, pero fui trabajandi, invirtiéndo y poniendolo lindo comprando cositas en Shein y Amazon.

Fue entonces cuando comencé a crear mi contenido para redes sociales con más enfoque y consistencia. Pasé de tener poquitos seguidores a generar una comunidad que aun esta en crecimiento. Aprendí sobre edición, formatos, tendencias, y descubrí qué tipo de contenido funcionaba mejor. Varios videos se volvieron virales, y con eso vinieron las oportunidades: marcas empezaron a contactarme para colaborar. En una de esas colaboraciones logré vender muchísimos productos para una marca externa y fue ahí cuando me dije:

“Si puedo hacer esto por otra marca, también puedo hacerlo por la mía.”

Así comenzó mi etapa como emprendedora. Creé mi propia empresa y lancé mi tienda online. Fue un proceso largo de aprendizaje, errores, pruebas y muchas horas de investigación. Probé proveedores, invertí en productos, descarté otros, perdí dinero en cosas que no me convencían. Pero seguí adelante con un objetivo claro:

Crear una línea de productos profesionales, accesibles y de calidad para manicuristas como yo, que trabajan duro y quieren ofrecer lo mejor.

Mi producto estrella es el Builder Gel, diseñado específicamente para poder ser utilizado tanto con técnica de nivelación con pincel como con dual forms. La mayoría de los builder que probé eran buenos para una técnica u otra, pero no para ambas. El mío tiene la consistencia perfecta: auto nivelante pero firme, ideal para construir uñas largas, resistentes y duraderas sin necesidad de técnica híbrida. Ya no tienes que reforzar con polygel debajo: este builder lo hace todo.

También lancé mi colección de brocas, limas, alicates, repujadores y efectos como el cat eye, que han sido parte esencial en mi mesa de trabajo desde que comencé. Hoy puedo decir con orgullo que la mayoría de las herramientas que uso en mi día a día son de mi propia línea.

Eli Nails Miami no es solo una tienda. Es el resultado de años de lucha, aprendizaje y pasión. Y mi mayor satisfacción es poder ayudar a otras manicuristas a crecer con productos que realmente marcan la diferencia.

Gracias por ser parte de esta historia.

Aquí hay espacio para todas las que soñamos con vivir de lo que amamos.